No es un jugador más de paso por la Selección, se le nota en la forma en que captura la...
No es un jugador más de paso por la Selección, se le nota en la forma en que captura la mirada de todos, aunque se lo ha visto poco jugando en el país, porque se fue a sus 11 años de Bolivia, Sebastián Gamarra se pasea con personalidad en el equipo de todos, parando a sacarse fotos, firmando autógrafos, respondiendo a los medios de comunicación y tratando de ganarse un lugar entre los convocados al duelo con Uruguay. Gamarra es además el jugador más joven de la Selección, con sus 18 años cumplidos este año asegura estar viviendo un sueño cada día, “Tengo emociones nuevas, imaginate al entrenar con estadio vacío se me pone la piel de gallina, imagino cuando este lleno, jugar ahí va ser un sueño cumplido”, le dijo a Late! El jugador que nació en Tarija y se formó en la Academia Tahuichi, casi siempre sale primero al campo de juego en las prácticas, busca la pelota y se pone a apuntarle al arco. Incluso en las últimas sesiones en el Siles, Sebas se quedó a ensayar tiros libres con los arqueros cuando ya todos se iban a cambiar y a duchar, contagió ese espíritu y se sumó Baldivieso a pegarle a la pelota con él.